En los últimos años, la industria de la construcción se ha visto en la necesidad de adoptar métodos de producción más eficientes y sostenibles para adaptarse a las necesidades del mundo moderno, esto ha dado lugar a innovaciones que han transformado la manera en la que se construyen los edificios. Una de las principales novedades de esta industria ha sido la construcción modular.
La construcción modular ha ido ganando popularidad en distintos países debido a que ofrece rapidez, sostenibilidad, eficiencia y prácticamente la misma calidad que una construcción tradicional.
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Actualmente, uno de los principales impulsores de la construcción modular ha sido el sector residencial, debido a la demanda de viviendas asequibles, ya que este método de construcción permite la producción eficiente de unidades de vivienda a gran escala.
Según el análisis de la empresa de investigación de mercado, KBV Reseaarch, el valor global de la construcción modular en el mercado fue de 83.6 mil millones de dólares en 2022 y se estima que alcance los 159.3 mil millones de dólares en el año 2030, con un crecimiento del mercado del 7.4%.
¿Pero qué es exactamente la construcción modular y cómo funciona? En este artículo te contaremos todo lo que necesitas saber sobre este método innovador de construcción y cuáles son las ventajas de este sistema que está revolucionando a la industria.
La construcción modular consiste en fabricar elementos de un edificio o vivienda en entornos controlados como una fábrica, esto permite la producción en masa y evita los contratiempos de una construcción tradicional.
Estos módulos, que pueden ser habitaciones completas, secciones de pared o techos, son posteriormente transportados al lugar de la obra donde son ensamblados.
El resultado final es un edificio que parece construido de manera tradicional, pero que ha sido ensamblado de manera mucho más eficiente.
Ventajas de la construcción modular
En la construcción tradicional, se llevan a cabo diversas etapas en el desarrollo de la obra, todas de manera secuencial, comenzando por la preparación del terreno, la cimentación para después comenzar con la edificación.
Por otra parte, en una construcción modular, estos trabajos se pueden hacer de manera simultánea, es decir, podemos avanzar en la preparación del terreno, la cimentación y la instalación de servicios públicos, mientras los módulos son fabricados fuera del sitio.
Además, con los módulos elaborados dentro de una fábrica se evitan los retrasos ocasionados por cuestiones climáticas.
Esta diferencia permite reducir significativamente los tiempos de la obra en una construcción modular, en comparación con los métodos tradicionales. Esto permite que las edificaciones se concluyan en la mitad del tiempo que una construcción convencional.
Los módulos se pueden fabricar según las especificaciones del proyecto, con diversas opciones de diseño, materiales y acabados. Desde viviendas unifamiliares hasta edificios para oficinas o escuelas, la versatilidad del método permite adaptarse a distintos tipos de construcción.
Además, es fácil ampliar o modificar un edificio modular ya que solo se requiere la incorporación de uno o más módulos según se requiera para expandir el edificio.
Los edificios modulares también son fáciles de reubicar en el momento que se desee, debido a la posibilidad de desmontar los módulos individuales que lo componen, adaptándose a las necesidades del ocupante.
La construcción modular tiene un menor impacto ambiental en comparación con los métodos convencionales, ya que, al fabricar los módulos en un entorno controlado, se puede optimizar el uso de materiales, lo que reduce significativamente los residuos.
El control sobre los procesos de producción permite una mayor eficiencia energética en las edificaciones y minimiza el impacto acústico y los problemas de tráfico que generan las obras convencionales.
Al ser proyectos de construcción de menor duración y reduciendo el gasto en mano de obra debido a que los procesos son más automatizados se reduce también el costo total de la obra, favoreciendo el ahorro económico del cliente.
No obstante, los costos podrían ser un problema al momento de transportar los módulos de la fábrica al lugar de ensamblaje si la distancia es muy larga o el lugar es de difícil acceso.
Dado que los módulos se construyen en fábricas con estrictos controles de calidad, los materiales y acabados suelen tener un nivel superior de precisión. Esto reduce errores comunes en obra, como defectos en acabados o estructuras inexactas.
Cada pieza está diseñada y revisada en condiciones óptimas, lo que garantiza que, al ensamblarse en el sitio, encajen perfectamente.
En un entorno donde la construcción modular sigue ganando terreno por su eficiencia y sostenibilidad, la innovación y la excelencia son claves para avanzar en la industria de la construcción.
Es por eso que empresas como Global Engineering Group (GEG), que se dedica a la construcción de naves industriales, se mantiene a la vanguardia con el compromiso de seguir brindando calidad y mejora continua en cada proyecto, impulsando prácticas que transforman el futuro de la industria.
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