La imagen corporativa es un elemento fundamental en el posicionamiento de cualquier empresa, ya que refleja la esencia y la personalidad de la marca, por lo que de ser implementada adecuadamente puede transmitir confianza y seguridad al cliente.
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Por esta razón es imprescindible definir la imagen corporativa enfocándose en el mensaje que se desea transmitir para captar la atención de los clientes, proveedores y público en general. En este artículo analizaremos cómo la imagen corporativa representa un componente estratégico crucial en la consolidación de una empresa constructora.
En términos más sencillos, ¿a qué nos referimos cuando hablamos de imagen corporativa? Hablamos de todas las ideas o percepciones que la empresa proyecta al público mediante sus elementos visuales, verbales, valores, cultura organizacional, acciones y la calidad de su producto o servicio.
Desde el logotipo, la paleta de colores, el eslogan, los anuncios promocionales, las campañas de mercadotecnia hasta la reputación formada ante los clientes, público y colaboradores reflejan la forma en que la marca es percibida ante el mundo.
¿Cómo se forma la imagen corporativa?
Si bien las empresas deben destacarse sobre la competencia luciendo la calidad de sus productos o servicios, también es importante generar una experiencia positiva para crear una conexión con sus consumidores que asegure cierta lealtad a la marca.
Según una encuesta de la firma internacional de auditorías y consultorías PwC aplicada a 15 mil personas en 12 países, el 42% de los consumidores dijo que estarían dispuestos a pagar más por una experiencia de compra más agradable.
Aunque la calidad y el precio siguen siendo una prioridad para los clientes, las experiencias positivas con la marca influyen en la decisión final de compra en casi todos los países.
Por el contrario, una mala experiencia provoca un impacto negativo a la imagen de la marca, según datos revelados por la organización American Management Association (AMA) en 2012, un cliente insatisfecho, en promedio, puede hablar mal del producto o servicio con al menos 10 personas.
Por lo tanto, desarrollar una imagen corporativa positiva puede llegar a convertirse en un requisito indispensable para que una marca se destaque sobre su competencia, según datos publicados por la agencia independiente del gobierno de Estados Unidos, Small Business Administration (SBA), el 83% de los consumidores deciden sus compras basándose en la imagen o confianza que refleja la marca.
Basándonos en la información presentada anteriormente, y retomando el tema de la construcción, a continuación, te sugerimos algunas formas en las que una empresa constructora puede fortalecer su imagen y hacerse de una reputación sólida ante el público, incluyendo su competencia y sus propios colaboradores:
Ser puntual en la entrega y hacer un buen cálculo de gastos dejará una buena impresión a los actuales y potenciales clientes, abriendo las puertas a futuras contrataciones.
Para lograr el primer punto, referente a la puntualidad de entrega, es recomendable desarrollar un calendario que incluya los objetivos clave, revisiones periódicas y fechas límite de cumplimiento.
En la cuestión de los presupuestos, es importante contar con el apoyo de un equipo profesional que nos ayude a valorar detalladamente todos los gastos involucrados en el proyecto, desde el diseño, la mano de obra y materiales hasta otros gastos generales como pago a contratistas, gastos legales, equipamiento, etc.
Es necesario llevar un registro organizado para el control de gastos según el presupuesto pactado para cada una de las etapas del proyecto, con el fin de identificar posibles reducciones de gastos o para cubrir imprevistos que se puedan presentar durante el desarrollo.
Se recomienda la revisión de proyectos construidos anteriormente que sean similares al proyecto en cuestión para analizar sus costos y poder tener una mejor estimación de lo que se va a gastar, tomando en cuenta las especificaciones del cliente, inflación, insumos cotizados en otras monedas y otros ajustes.
La construcción es un sector que se mantiene en constante innovación, por lo que es necesario mantenerse actualizado en las nuevas tendencias y necesidades que requiere el sector, esto refleja un compromiso con la calidad y excelencia.
Para garantizar un equipo de trabajo calificado, las empresas constructoras deben invertir en programas de capacitación enfocados en seguridad, sustentabilidad, técnicas modernas de construcción y manejo de equipos que faciliten el trabajo.
En los últimos años, hemos visto distintas innovaciones en este sector que han revolucionado a la industria en general, como es el caso de metodologías como el BIM, creado para facilitar el diseño de planos en 3D y la centralización de la información, procesos asistidos por softwares modernos.
Por otra parte, encontramos sistemas para la optimización de procesos como el LEAN Construction, un método que nos ayuda a agilizar el desarrollo de un proyecto, minimizando la generación de residuos, costos y actividades innecesarias que puedan retrasar la obra.
Entre otras tendencias que han cobrado relevancia en estos tiempos tenemos también la construcción modular, que ha ganado popularidad por su eficiencia en tiempo y costos. Consiste en la prefabricación de módulos o paneles para su posterior traslado y ensamblaje en otro sitio.
Ante las crecientes preocupaciones globales por el cambio climático, el sector de la construcción ha comenzado a adaptarse en la creación de prácticas sostenibles para generar menos contaminación, como lo es la creación de materiales ecológicos, ahorro de energía y recursos, además de la creación de certificaciones LEED que acreditan la reducción del impacto ambiental en los procesos de diseño y construcción de las edificaciones.
Otro tipo de capacitación importante es la formación en tecnologías emergentes como herramientas digitales, operación de drones y realidad virtual para mejorar la eficiencia y optimizar procesos en la construcción.
El visto bueno de organizaciones externas aumenta la confianza en que la empresa está capacitada para desarrollar proyectos seguros, sustentables y de alta calidad optimizando al máximo los recursos y el tiempo del que se dispone.
En la industria de la construcción existen diversos tipos de certificaciones enfocadas en diferentes aspectos, algunas de las más importantes se centran en garantizar la seguridad y la salud de los trabajadores como es el caso de la Norma ISO 45001, diseñada para identificar riesgos en el lugar de trabajo e implementar medidas para controlarlos y las certificaciones de OSHA (Occupational Safety and Health Administration) que establecen y hacen cumplir estándares de seguridad y salud en el lugar de trabajo.
En cuestiones de calidad, se puede obtener la certificación ISO 9001, enfocada en mejorar la calidad de productos y servicios, en una empresa de construcción puede ayudar a cumplir con los estándares requeridos en cada proyecto, reducir los errores y asegurar la satisfacción del cliente.
Otra de las más importantes corresponde al cuidado del medio ambiente, donde destacan las certificaciones LEED, desarrolladas por la U.S. Green Building Council, que promueve la sostenibilidad en el diseño, construcción y funcionamiento de edificios.
Crear una red de contactos ayuda a mejorar la imagen de la marca, un ejemplo de esto es el networking que consiste en asistir a eventos presenciales para conocer a profesionales de nuestro sector e intercambiar información o emplear métodos digitales como las redes sociales profesionales y otras aplicaciones.
Asistir a ferias, congresos y exposiciones enfocadas en el sector de la construcción es una estrategia que puede ayudarnos a interactuar con nuestro público objetivo de manera directa y dar a conocer en qué se diferencia nuestra empresa del resto y la forma en que trabajamos para obtener mayor visibilidad de la marca.
En estos eventos es importante aprovechar para distribuir material informativo como folletos y promocionales de nuestra marca, además de mostrar algunos de nuestros procesos para generar interés de posibles clientes.
De esta manera, las empresas logran establecer contactos valiosos que pueden conducir a oportunidades de negocios y fortalecer el reconocimiento de la marca.
Por otra parte, la presencia de la marca en plataformas digitales profesionales como redes sociales tipo LinkedIn o Facebook permite ampliar la red de contactos de manera virtual y contactar a profesionales en puestos clave que puedan requerir el servicio que ofertamos.
Las campañas de mercadotecnia son indispensables para destacar los aspectos que nos diferencian de nuestra competencia, ayudando a proyectar profesionalismo, experiencia y confianza.
Esta inversión no solo favorece a la promoción de servicios en el sector de la construcción, sino que también contribuye a destacar la imagen de la marca.
Una estrategia efectiva es la creación de contenidos educativos y de valor en forma de artículos, blogs, videos, etc. dirigidos un público objetivo, previamente estudiado, enfocándonos en sus necesidades, hábitos de búsqueda y consumo.
Con estos contenidos no solo se fortalece la imagen de la empresa como líder profesional en su sector, sino que también se puede atraer tráfico orgánico a la página web mediante búsquedas de Google.
Al mismo tiempo es importante tener una presencia activa en las redes sociales, compartiendo fotos de nuestros procesos, proyectos terminados y contenidos de valor, interactuando y respondiendo a los seguidores para reforzar la cercanía con posibles clientes.
Con todo lo anterior, es preciso mencionar que desarrollar una imagen corporativa positiva puede ser la clave del éxito para una empresa en la industria de la construcción, en este sentido, Global Engineering Group (GEG) ha demostrado ser un claro ejemplo de una compañía que ha sabido consolidar los elementos esenciales para posicionarse como una marca confiable y competitiva en el sector, con una meticulosa atención a la calidad, el profesionalismo y el compromiso con la satisfacción del cliente.
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